Introducción

El albaricoque (Prunus armeniaca) es el fruto del albaricoquero, árbol de la familia de las rosáceas. Es originario de Asia y fue introducido por los romanos en Europa. Ahora empieza su temporada, que suele durar de primavera a verano. Su pulpa no es muy jugosa y cuando está maduro llega a tener textura harinosa.

Composición nutricional del albaricoque

Como veis en la tabla, los albaricoques tienen un porcentaje alto de agua y moderado de hidratos de carbono, con lo que es una fruta fantástica que hay que aprovechar ahora que está de temporada.

Resalta su contenido en potasio y muy bajo contenido en sodio que la convierte en una fruta ideal para hipertensos ya que es muy diurética. Pero ese mismo contenido en potasio no es conveniente para personas con problemas renales o insuficiencia renal. El potasio es necesario para el equilibrio de agua dentro y fuera de la célula, también para la trasmisión del impulso nervioso y la actividad muscular.

El color naranja nos da la información de que es una fruta rica en beta-carotenos o provitamina A, con lo que es destacable su acción antioxidante. Es una provitamina que en el organismo se transforma en una vitamina liposoluble que va fenomenal para la piel y las mucosas, el pelo y el sistema inmunológico.

El contenido en fósforo, calcio y magnesio es también importante, minerales que intervienen en la formación del hueso, uñas, contracción muscular y sistema nervioso.

Es una fruta adecuada para todas las edades, niños, adolescentes, adultos, mujeres embarazadas o lactantes, deportistas y personas mayores. Va muy bien en dietas de adelgazamiento por su bajo contenido calórico y son saciantes por su contenido en fibra.

No son recomendables para personas con alergia a rosáceas (melocotón, paraguayo, almendras…)

Para su consumo es recomendable el lavado previo para eliminar restos de tierra.

Derivados

Del albaricoque se suele obtener algunos productos derivados como  mermeladas, zumos y los orejones, que son albaricoques secos. Éstos tienen un contenido en agua muy bajo por el proceso de secado que se hace en cámaras a unos 65-70ºC, con lo que su valor calórico aumenta bastante. Pero también aumenta y mucho la concentración de ciertos minerales como el potasio, el calcio, el fósforo y el magnesio y también aumentan mucho las vitaminas como la A y los folatos, quedando sin apenas vitamina C, que como es termolábil e hidrosoluble, desaparece prácticamente en el proceso de secado.

Ración

Una ración adecuada de albaricoques sería de unos 150g, aproximadamente unos 3 albaricoques, dependiendo de la clase, ya que los hay más gorditos y más pequeños.
Mi recomendación sería comer albaricoques frescos en su temporada (primavera- verano) y en el resto del año consumir albaricoques desecados que por su contenido aumentado de vitaminas y minerales es bastante recomendable. La ración ya no sería la misma que siendo frescos, habría que consumir bastante menos cantidad y son ideales para deportistas.

Comer albaricoques como postre en una comida o cena es ideal, sobre todo si tienes diabetes, ya que de esta manera se ralentiza la absorción de sus azúcares.

Si quieres prepararlos para algún postre con un toque diferente, puedes hornearlos con un crujiente de frutos secos y/o harina integral y un toque de vainilla  que después con una bolita de helado está de fabula o también puedes preparar una macedonia de albaricoques con yogur.

De cualquier forma te aconsejo su consumo, aprovéchate de esta fruta tan deliciosa que la temporada es corta.

Geles

Mi nombre es MªÁngeles Cano Villalba, pero llámame Geles. Soy Dietista-nutricionista y cocinera aficionada. En Natural Castelló voy a ayudarte a cuidar tu alimentación y tu salud.