1.Corta la pechuga en dados e introduce en el robot de cocina.
2.Tritura bien y añade el huevo y la sal. Vuelve a triturar hasta que quede una masa homogénea.
3.Dispón un buen pedazo de film de plástico y vierte la mezcla en el centro.
4.Extiéndela unos 20 centímetros y un grosor de 3 dedos como mucho.
5.Envuelve la mezcla con cuidado que no queden bolsas de aire grandes.
6.Haz presión con el film de plástico y cierra como si fuera un caramelo, rodando el rulo pro la encimera. Ata los extremos para que no se salga el contenido.
7.Lleva al microondas en un plato y tapa. Cocina 2 minutos a 650W. Dale la vuelta al rulo y cocina otros 2 minutos.
8.Comprueba que no queden zonas muy blandas y crudas, si es así, vuelve a darle un minuto más.
9.Deja reposar en el microondas 5 minutos.
10.Saca al exterior y cuando esté templado lleva al frigorífico para que se enfríe del todo.
Aspectos a tener en cuenta
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Es importante reservar el fiambre envuelto en film de plástico, así de esta manera, no perderá tanta humedad. Piensa que no tiene ningún aditivo que ayude a que conserve el agua, por lo que si se guarda bien sellado será mejor.
No te voy a engañar, no sé lo que dura este fiambre porque la mayoría de las veces que lo he preparado, no me dura ni dos días, ya que aprovecho para hacer varias recetas con él, además de desayunar unas buenas tostadas integrales con este pavo tan rico.
Si es mucho fiambre para tu casa, puedes cocinarlo, esperar a que enfríe y cortarlo por la mitad. Puedes congelar una parte y disfrutar de la otra, y cuando se termine, descongelas el que tenías reservado. Se mantiene estupendamente.
Yo no sé si habrás leído las etiquetas de los fiambres que hay en el mercado, pero realmente me echa mucho para atrás comprar este tipo de productos, a los que se les añade infinidad de ingredientes que nada tienen que ver con el fiambre de pavo. Al final te das cuenta que de carne tienen mucho menos cantidad de la que podrías imaginar. Por esa razón yo me hago mi propio fiambre de pavo.
Otras veces lo preparo de pollo o lo mezclo. Si quieres darle tu propio toque, puedes añadirle especias o hierbas, con lo que adquiere sabores y aromas diferentes. Por ejemplo añadir orégano, azafrán o pimentón, le da un toque diferente, haz pruebas y descubre cuál es tu fiambre preferido.
A veces también incluyo ciruelas o pasas desecadas, realmente deliciosa la mezcla.
Si no tienes microondas puedes cocinarlo al vapor o incluso cocerlo. Para mí la opción del micro es la ideal por la rapidez.
Como te decía puede utilizarlo para desayunar con tus tostadas o para hacerte bocadillos y también para incluirlo en ensaladas de pasta, de arroz, de legumbres o en las ensaladas que acompañan tu plato principal. También está muy rico si te quieres preparar unas lonchas a la plancha.
La textura, obviamente no es la misma que la del pavo frío industrial, pero está rico y no lleva nada más que pavo, huevo y sal.
Si eres hipertenso y no quieres añadirle la sal, no hay problema, no notarás prácticamente la diferente, ya has visto que la cantidad que he incorporado es pequeña.
Este pavo frío aporta pocas calorías ya que la pechuga de pavo es bastante ligera, aporta bastante cantidad de proteínas de buena calidad y pocas grasas.
Mejor manera de consumir un fiambre de pavo no hay.
Mi nombre es MªÁngeles Cano Villalba, pero llámame Geles. Soy Dietista-nutricionista y cocinera aficionada. En Natural Castelló voy a ayudarte a cuidar tu alimentación y tu salud.